jueves, 30 de abril de 2015

No son turistas, son pijos maleducados

29.04.2015 – Rodar documentales en Nepal aporta experiencia. Te das cuenta de dónde estás, quién eres, qué eres… con respecto al resto del mundo. Ser alpinista ayuda a sentirse pequeño, fomenta el compañerismo, cura el alma y en ocasiones, te obliga a tirar de humildad, grandes dosis de humildad, cuando dejas los Pirineos y los Alpes y te lanzas a la conquista de cumbres situadas en lo que conocemos como el Tercer Mundo.
Nepal ha vivido el horror, ha experimentando la violencia de la madre naturaleza, atrapando a miles y miles de turistas que se encontraban en Kathmandú y en los valles que descienden de varios ochomiles. Algunos se encontraban en Pockara, otros en Kathmandu y algunos en Luckla, con su aeropuerto espectacular, desde donde parte el trekking del campo base del Everest, donde de momento, han fallecido mas de 20 alpinistas. Las cornisas de hielo que separan la cumbre del Pumori del Everest, por encima de la cascada del hielo del Khumbu, son peligrosas a lo largo del año. Con un terremoto de 7,9 la situación cambia por completo y tal y como ha sucedido, la mayoría de cornisas se han desprendido, causando avalanchas impresionantes. Solo quien ha vivido un alud puede saber lo que se siente. De momento, junto a los miles de fallecidos y heridos, tenemos a ocho millones de nepalíes afectados por el terremoto. Unas 72.000 personas están abandonando a pie la zona del valle de Katmandú en busca de agua y comida, mientras miles de occidentales protestan porque les están evacuando lentamente. Algunos incluso se quejan de que les tratan como perros…
Quienes son incapaces de comprender dónde están, en qué país están y lo que les ha pasado a las gentes que les acogen, no son turistas, son pijos maleducados. Gente sin alma, sin corazón, que viven a golpe de talonario creyéndose superiores a los demás. Si el aeropuerto es un caos, te esperas. Si tienes hambre, piensa que los nepalíes todavía tienen más hambre. Ellos han perdido su casa, tú no. Ellos han perdido a familiares y amigos, y no tienen un país que les acoja y les envíe un avión. Tú tienes American Express, ellos no. Viajar a zonas pobres, por muy cool que pueda parecer, conlleva aceptar unas normas del juego que muchos desconocen, o peor… muchos no han sido educados para conocerlas. 

Víctor Riverola

España. Es periodista, realizador de documentales y escritor. CEO de la productora Matterfilm. Imparte con regularidad conferencias y seminarios sobre geopolítica e historia en diferentes centros culturales e instituciones, y en universidades en Europa, América y Asia.

miércoles, 29 de abril de 2015

Coches de choque.

De vez en cuando todavía cruzan las caras de algunas muchachas
como icebergs sonámbulos por mi memoria
y tras esos rostros una fila inacabable de arrepentimientos,
de fotos que no nos hicimos y daños que no prescriben.

A menudo me quedo anclado en algo que no dije
y la vida se hace un partido de tenis contra el futuro
donde las bolas son todas esas cosas que ya no puedes arreglar.

De ese modo se van yendo las horas
y la tarde me va arrastrando
como un lento carromato hacia la nostalgia,
tirando de mí hacia algún lugar
que se encuentra varios pisos por debajo de la suerte.

Y allí las encuentro a todas
hermosas y distantes como el sueño de luna de los niños.
Cuando las veo entiendo de nuevo
todo lo que nunca me logro perdonar:
no haber sabido decir las palabras correctas,
ni mentir a tiempo,
ni pedir perdón cuando faltaba.

No he sabido más que romper algunos corazones
y rematarlos en el tiempo de descuento
cuando las llamadas eran algo así
como inventarios de reproches,
una macabra competición de agravios
para sentirnos bien.

Me hubiera gustado traer algo más
en mi mochila desde el pasado,
quizá algún recuerdo que nos dijera
que hubo luz entre nosotros,
que el final no fue del todo malo.
Pero con cada una de ellas
el final fue sólo el fin.
Nada más,
ni siquiera un lugar para lamerse las heridas
o reflexionar tranquilos.
Siempre aparecía otro corazón
para continuar
con mi interminable facilidad
de hacer del amor un ring
y de un domingo una disputa.

Algún día quizá sabré cómo librarme de eso,
de mí y esta maldita forma de chocarme de frente
contra el cuerpo de quien aseguro amar,
de no saber acoger a nadie sin tirones,
sin robarle mucho,
sin que me quiten todo.

Y así me introduzco en la noche
silencioso, con la vida golpeándome en el cráneo
en mi barca remando
en dirección a la tristeza.

Marwan

martes, 21 de abril de 2015

Hombres del Mar, Barcos de leyenda



Esta exposición Hombres del Mar, Barcos de leyenda en el Museo Naval, Madrid,, que versa sobre una serie de Barcos Legendarios, tanto reales como imaginarios.  estará abierta desde el 15 de Abril al 15 de Julio.


lunes, 20 de abril de 2015

viernes, 17 de abril de 2015

Jacob Collins














Jacob Collins nació el 11 de agosto de 1964, en Nueva York. Procede de una familia de artistas y académicos. Cuando era niño, empezó a copiar obras de maestros antiguos en el Museo Metropolitano de Arte. 

miércoles, 15 de abril de 2015

Bruno Catalano, escultor.












El escultor francés Bruno Catalano es conocido por crear estatuas de bronce no convencionales en las que faltan las secciones centrales.

martes, 14 de abril de 2015

Frase

«Confía en el tiempo, que suele dar dulces salidas a muchas amargas dificultades»

Miguel de Cervantes Saavedra