viernes, 31 de enero de 2014
jueves, 30 de enero de 2014
A ver si logra usted ser un poco menos bestia. Fernando Savater
La cortesía, hoy poco frecuente, es un triunfo de la civilización sobre la barbarie.
La única plaga de la conducta humana aún peor que la sinceridad a ultranza es la espontaneidad sin afeites en el trato.
Nada bueno presagia que alguien nos amenace con un arrollador “si quieres que te sea sincero…”.
Pero cuando se nos viene encima uno muy “natural”, que “no se anda con zalamerías ni cortesías” ha llegado la hora de huir sin miedo al ridículo, porque estamos en peligro inminente. Ambos dañinos hábitos, sinceridad y ausencia de modales, suelen darse juntos en el comportamiento de los niños. Como botón de muestra, aquel infante que increpa a la hermana de su mamá: “¡Qué fea eres, tía Eduviges!” La madre protesta: “¡Pero cómo te atreves a decirle semejante cosa a tu tía! ¡Dile ahora mismo que lo sientes mucho!”. Y el pequeño pecador redondea: “Siento mucho que seas tan fea, tía Eduviges”.
Comportamientos sinceros y espontáneos de la niñez: toda la buena educación es una brega denodada y a veces incomprendida para intentar erradicarlos.
A fin de cuentas la grosería, en sus rasgos orales o gestuales, no es ni más ni menos que una forma de pereza. Y toda la civilización, de la cual es la cortesía el estandarte que nunca debe ser arriado, consiste en esforzarse y tomarse molestias. ¿Por qué? Muy sencillo: lo natural y espontáneo es que cada uno de nosotros se considere el centro del mundo, el ser más importante que pisa el planeta y ante cuyos apetitos deben inclinarse los cielos. Eso es lo que nos sale de dentro y nuestros primeros impulsos siempre van en esa dirección, aunque a veces debamos reprimirlos por el simple y abyecto temor a un bruto aún más despiadado que nosotros.
Un rinoceronte, por poner el ejemplo de un carácter no muy distinto del de usted o el mío, sólo cede el paso en el abrevadero cuando llega un rinoceronte con cuernos aún mayores o un elefante.
Por doloroso que resulte admitirlo, los “usted primero, señora mía” o “sírvase usted, que yo aguardo mi turno” no son usos frecuentes entre paquidermos.
En cambio la cortesía consiste en algo sumamente antinatural y artificioso: dar preferencia voluntariamente al otro, o sea preferir su conveniencia y satisfacción a la nuestra. Y ello no por temor a su venganza, sino por una especie de orgullo en no ser tan animal como a uno le apetecería rabiosamente ser. ¿Hipocresía? Desde luego, pero bendita sea la hipocresía cuando no consiste en fingir buenas intenciones para enmascarar malas acciones sino en disciplinar nuestra íntima avidez de bestias para que la convivencia tenga estética de concierto y no se malbarate en el furor de una batalla campal … Fuera de los usos ceremoniales, en la vida cotidiana, la cortesía y su ritual de buenas maneras no atraviesa hoy su mejor momento, cosa que celebran ruidosamente algunos imbéciles que se tienen por especialmente modernos. Pero no hay nada de moderno en la grosería, que es tan antigua como la barbarie frente a la perpetua y frágil novedad de las buenas maneras: y si no, que se lo pregunten a los rinocerontes.
Fernando Savater. El País, 2014.
miércoles, 29 de enero de 2014
Soy el capitán de mi alma
"Invictus" es el poema más conocido del poeta inglés William Ernest Henley (23 de agosto de 1849 — †11 de julio de 1903)
martes, 28 de enero de 2014
lunes, 27 de enero de 2014
domingo, 26 de enero de 2014
sábado, 25 de enero de 2014
viernes, 24 de enero de 2014
Hecho con papel
Recicla papel con el método Jiseung
Estos objetos están hechos a mano con papel reciclado 100 % por artesanos de Best Before en París. Corinne Muller y Piotr Oleszkowicz dan nueva vida al arte antiguo coreano de tejido de papel.Las tiras de papel son enrolladas y crean cuerdas que se trenzan y se convierten en hermosas cestas.Mirad el video que muestra a Na Seo Hwan realizando el metodo tradicional coreano llamado Jiseung .
Jiseung/Noyeokgae: paper weaving from Aimee Lee on Vimeo.
jueves, 23 de enero de 2014
miércoles, 22 de enero de 2014
Juegos de Invierno
El presupuesto inicial eran 12.000 millones de dólares, pero a mediados del año pasado ya se habían gastado 51.000. (Los últimos juegos de invierno, celebrados en Vancouver, costaron 9 veces menos).
Ayer por la mañana, Steve Rosenberg, el corresponsal de la BBC en Moscú, estaba visitando el Centro de Biatlón, una de las instalaciones estrella de los Juegos, cuando dió cuenta de que algo raro ocurría en los baños.
Rosenberg ha dejado claro que la fotografía no era ningún montaje:

Enlace al análisis que ha hecho la BBC http://www.bbc.co.uk/news/world-europe-25830617
Publicado por Principia Marsupia 21 de enero de 2014.
martes, 21 de enero de 2014
¿Dónde están los 16.000 millones?
El presidente de la Generalitat, Artur Mas, y Oriol Junqueras
argumentan con frecuencia y rotundidad que si Cataluña fuera
independiente, la Generalitat dispondría cada año de unos 16.000
millones de euros adicionales. Con ese dinero que “España nos roba” se
podrían prestar nuevos servicios, evitar recortes y reducir deuda.
Veamos algunos ejemplos. En junio de 2012, en una entrevista en el canal
en español de la CNN, el señor Mas, decía que: “Si Cataluña no tuviese
un déficit fiscal tan grande con España, de 20.000 millones de dólares
anuales, en dos o tres años podríamos liquidar totalmente nuestra
deuda”. En diciembre del mismo año, en un debate en la emisora RAC1, el
señor Junqueras decía: “¡Hombre!, tendríamos 16.000 millones más de
euros cada año; (...) son cuatro veces más que todos los recortes juntos
que hace la Generalitat; (...) mira que es fácil ¡por el amor de
Dios!”.
Esa cifra surge del informe de la Generalitat Resultats de la balança fiscal de Catalunya amb el sector públic central 2006-2009,
de marzo de 2012, que hizo famosos los exactamente 16.409 millones de
euros de déficit fiscal, que según la Generalitat, tuvo Cataluña con el
Estado en 2009 (posteriormente ha dado a conocer una cifra parecida para
2010 y todavía no hay datos para 2011). Artur Mas escribe en el libro What’s up with Catalonia?, que se trata de un déficit anual “inmutable”.
Muchos catalanes están convencidos de que la Generalitat
independiente dispondría cada año de esos 16.000 millones de euros
adicionales. Y ese es un poderoso argumento en favor de la
independencia. Pero realmente no es así. Y para explicarlo, imaginemos
que al día siguiente de la independencia, los señores Mas y Junqueras se
reúnen con el nuevo conseller de Hacienda, uno de los
economistas que han puesto su prestigio como garantía de ese cálculo,
para decidir en qué se van a gastar esos 16.409 millones.
El conseller carraspea y les dice que en realidad la Generalitat no dispone de esos 16.409 millones adicionales.
Los señores Mas y Junqueras, que se habían creído y explicado de
buena fe que la independencia aportaría recursos por un importe
equivalente a cuatro veces los recortes previstos, piden al conseller
que les explique cómo se calculó el déficit fiscal y de cuántos
recursos adicionales disponen. Sigamos su explicación en cuatro pasos,
utilizando los mismos datos y el mismo método de cálculo del propio
informe de la Generalitat.
Primero. Se estimó que Cataluña aportó 46.195
millones de impuestos a la recaudación del Estado. Pero como no existe
un registro contable de este dato y como no todos los impuestos que se
cobran en Cataluña los pagan los catalanes ni todos los que pagan los
catalanes se recaudan en Cataluña, hubo que hacer muchas hipótesis para
calcularlo.
Segundo. Se estimó que el Estado aportó a Cataluña
45.403 millones de euros en forma de bienes y servicios públicos que una
Cataluña independiente tendría que producir en su lugar.
Este cálculo tampoco es fácil. El conseller explica que solo
se contabilizó el gasto del Estado que se realizaba en el territorio
catalán. Y así, por ejemplo, en embajadas y consulados no se incluyó ni
un euro, aunque estos sean también utilizados por los catalanes; en
administración tributaria y justicia tampoco se computaron los gastos de
funcionamiento situados fuera del territorio catalán; y en defensa,
solo se computó el gasto de las pocas instalaciones militares que hay en
Cataluña.
Los señores Mas y Junqueras estarían empezando a pensar que a efectos
de hacer el presupuesto de una Generalitat independiente, esa forma de
calcular los costes no era muy realista. Pero dejemos que el conseller continúe su explicación.
Tercero. Restando las cifras de los puntos
anteriores se obtiene un déficit fiscal de Cataluña con el Estado de 792
millones. [Es lo que se llama el déficit fiscal observado por el método
del flujo monetario].
Los señores Mas y Junqueras preguntaron a la vez ¿cómo que 792?, ¿pero no eran 16.409? El conseller les recuerda que queda un último paso.
Cuarto. “Neutralización” del déficit público
estatal. Consiste en añadir a los ingresos que Cataluña aporta al Estado
la parte que le correspondería del déficit público del Estado. O, lo
que es lo mismo, descontar del gasto del Estado en Cataluña la parte que
no se paga con impuestos, sino con la deuda emitida para financiar ese
déficit.
La Generalitat calculó esa parte repartiendo el déficit del Estado
proporcionalmente a los ingresos aportados por cada comunidad autónoma.
En 2009 el Estado tuvo un déficit de 81.113 millones de euros. La
Generalitat calcula que Cataluña contribuyó con el 19,25% de los
ingresos del Estado por lo que añade 15.618 millones de euros a los 792.
Así obtiene los 16.409 [es lo que se llama el déficit fiscal por el
método del flujo monetario neutralizado]. El conseller
justifica la “neutralización” argumentando que los 15.618 millones es
una deuda que se pagará con impuestos de los catalanes de años futuros y
lo computa como un ingreso virtual que Cataluña ha hecho al Estado en
el presente.
Las razones, el significado y el método de cálculo de la
neutralización del déficit público en caso de independencia es un tema
controvertido. En sus estudios del beneficio fiscal de la independencia,
la Fundació CatDem de CiU dice que no hay que neutralizar, y la
Fundació Josep Irla de ERC, que sí debe hacerse.
En realidad, “neutralizar” el déficit es una manera de tomar en
cuenta el efecto del ciclo económico sobre el saldo fiscal. Aunque el
señor Mas diga que es “inmutable”, su composición y su valor cambian
mucho con el ciclo económico y un solo año no es suficiente para
analizar el problema. Pero no es nuestra intención entrar ahora en ello.
Nuestro objetivo y lo que preocupa realmente a los señores Mas y
Junqueras es saber si los 16.409 están disponibles o no para prestar más
servicios, evitar recortes o reducir deuda.
Lamentablemente no, tiene que reconocer el conseller. ¿Por
qué? Porque de los 16.409 millones solo 792 es dinero contante y sonante
pagado con impuestos del año 2009. Como hemos visto, el resto, 15.618,
corresponde a virtuales impuestos futuros que no están disponibles
porque los catalanes aún no los han pagado. Para poder gastarlos ahora
habría que endeudarse.
“¡Pero esto no es lo que hemos contado!”, dice el señor Junqueras. A
ver cómo explicamos eso en las entrevistas que nos hacen en TV3, dice el
señor Mas; porque si para disponer de esos 16.409 millones nos tenemos
que endeudar en 15.618 ¡así cómo vamos a reducir la deuda en dos o tres
años!
En efecto, no es lo que habían contado.
Tampoco habían contado que el método utilizado infravalora los costes
de los servicios que antes de la independencia prestaba el Estado y que
ahora tendría que asumir la Generalitat. Por ejemplo, los 16.409
incluyen un gasto de la Agencia Tributaria en Cataluña de 236 millones
pero el estudio del Consell Assessor per a la Transició Nacional estima
que el coste para Cataluña independiente será de entre 400 y 750
millones anuales, sin contar la inversión inicial. Tampoco se incluyeron
otros gastos como la aportación de Cataluña a la UE, quizá porque se
daba por hecho que de momento quedaría excluida aunque lo negasen.
En su informe, la Generalitat también calcula los costes de todos los
servicios del Estado que beneficiaron a los catalanes,
independientemente de que se prestaran desde dentro o fuera de Cataluña
(lo que se llama el método del flujo beneficio), y el resultado es que
en vez de un déficit de 792 millones, Cataluña tuvo un superávit de
4.105 millones antes de neutralización del déficit del Estado y un
déficit de 11.261 millones después de neutralización.
Se puede discutir mucho sobre las ventajas y los inconvenientes de la
independencia de Cataluña. Pero Cataluña no hubiese dispuesto en 2009 y
2010 de unos 16.000 millones para financiar servicios públicos
adicionales a los suministrados por el Estado. Y si estamos equivocados,
agradeceríamos que alguien nos diga de dónde saldrían.
Josep Borrell es catedrático Jean Monnet y Joan Llorach es empresario.
Publicado en el diario El País, 20 de enero de 2014
lunes, 20 de enero de 2014
Amor o codicia. Elvira Lindo
De aquí a que la infanta Cristina haga el paseíllo, exterior o intrauterino, lo habremos dicho todo. Habremos dicho tanto y tan confuso que cuando esto acabe, los opinadores recordaremos que teníamos razón aunque no sepamos muy bien lo que habíamos defendido. Cuando el pastel se descubra y sepamos lo que va a ser de uno y lo que será de la otra, los hay que dirán: “no, si yo ya…”, o los que añadirán: “no, si ya yo…”. De aquí a que la Infanta se vea en ese trance que jamás ella imaginó para sí, la institución monárquica habrá estado en boca del pueblo soberano: en bares y mercados, en tertulias televisivas, que vienen a ser lo mismo; en taxis y en peluquerías, y en tertulias televisivas, que para el caso vienen a ser lo mismo. Así que antes de que este asunto llegue a cualquiera que sea su final, quiero dejar aquí mi particular visión de los hechos. Las cosas, por escrito.
La clave es que en España siempre acabamos discutiendo sobre lo accesorio y tendemos a obviar lo fundamental. Ahora andamos a vueltas con el paseíllo de la Infanta. Una España dividida: los que quieren evitárselo y los que se toman como algo personal el que esta señora vaya por la calle para que se la pueda increpar. Yo no he entendido jamás a los que acuden a los juzgados para insultar a los imputados o a los acusados. Si por mí fuera, le evitaría a cualquiera el trago. No me gusta ese espectáculo medieval que nos remite a un pueblo brutal celebrando la pena del otro. Pero lo que es terrible es que dediquemos tanta energía a un detalle que nos aleja del asunto fundamental.
Da la impresión de que en la Casa Real se educó a los descendientes de una manera desigual.
Aquí lo que ha habido es un problema de educación, lo cual, lo sé, podría parecer una obviedad hablando de España, pero no lo es tanto si las protagonistas son mujeres que han tenido la posibilidad y también la obligación de adquirir una cultura excelsa. Da la impresión de que en esa casa, que es la Casa Real, se educó a los descendientes de una manera desigual, siguiendo criterios contradictorios y rancios: por un lado, hubo un esmero en la educación del Príncipe, que por varón era el que estaba destinado a reinar; por otro, se descuidó la formación de las dos chicas, que en mayor o menor medida también tendrían que representar a su país en actos institucionales. Obtuvieron sus privilegios como princesas, pero no hasta el punto de saber elegir maridos que no fueran rapaces y aprovecharan su nueva situación para beneficiarse de la manera más marrullera posible. Les faltaron lecciones de ética, algo más allá de vestir un traje largo en fiestas de la aristocracia europea o de presidir actos de caridad. Tenían que haber sabido que su posición estaba condicionada por el servicio a su país y que si ese servicio fallaba o se vulneraba, no habría pueblo que aprobara una institución basada en los vínculos de sangre. Quien más necesitaba la asignatura de Educación para la Ciudadanía eran ellas, amén de otros representantes públicos.
Como nunca hablo en tertulias y similares, hace un tiempo que en los pasillos de mi casa me oyen rumiar la siguiente teoría: la única manera que tenía esta señora de cumplir con la patria que le paga, con la institución a la que representa, y de demostrar su inocencia (no hablo de inocencia penal, sino ética) era haberse separado de su señor esposo desde el primer momento y haber renunciado a su título de Infanta. ¿Cómo ha podido seguir apoyando a quien se supone que puede echar por tierra una institución a la que ella debía lealtad desde la misma cuna? El amor no es compatible con eso. Y un abogado aduciendo las razones del corazón, en este caso en particular, es patético. Quien tuvo el derecho a paralizar una ciudad como Barcelona para que la vitorearan el día de su boda ha de tener después la decencia de renunciar a sus privilegios cuando se hace público que ese señor que eligió para pasear de su brazo era un farsante que se dedicaría a transformar el presunto amor en pingües beneficios.
Alguien debería explicarle a la Infanta que, más allá de sus responsabilidades ante la justicia, está la falta de ejemplaridad en su comportamiento. Alguien debería reprocharle a sus educadores, fueran quienes fueran los que se encargaron de una formación tan coja, que a las mujeres, por muy alta que sea su cuna, ya no se nos educa como a señoritas del XIX, cuyo encanto estaba basado en la ignorancia de esos burdos asuntos con los que las demás nos manchamos las manos todos los días, apechugando por fortuna con las consecuencias de nuestros actos. Ya no hay lugar para la mujer que se hace la tonta, menos aún para aquellas a quienes la vida les proporcionó tantas posibilidades de conocimiento.
Permanecer junto a un hombre que timó al Estado, gracias a que algunos miembros de la clase política perdieron el culo por meterle dinero en el bolsillo, es aprobar su falta de decencia. ¿No hay nadie en todo ese equipo de asesores, viejos profesores o jefe de la Casa que tenga el coraje de explicarle que esto no es una conspiración contra ella, sino que es la consecuencia de un mal comportamiento? ¿Se lo han dicho sus padres?
Porque ahí radica todo. Nunca es tarde para corregir a quien fue educada de manera tan arcaica que aún no sabe distinguir en la mirada de un hombre lo que es amor y lo que es codicia.
domingo, 19 de enero de 2014
sábado, 18 de enero de 2014
viernes, 17 de enero de 2014
jueves, 16 de enero de 2014
Fabricar un pantalón vaquero ‘cuesta’ cerca de 3.000 litros de agua

Un estudio realizado por investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), con el apoyo de la Fundación Botín y su Observatorio del Agua, ha analizado el impacto que tiene la fabricación de los pantalones vaqueros sobre los recursos hídricos.
Los resultados revelan que se requieren entre 2.130 y 3.078 litros de agua para elaborar este producto, y que el consumo está principalmente determinado por el impacto hídrico de su materia prima, el algodón. Solo el cultivo de esta planta representa entre el 3% y el 4% del agua que se emplea en todo el mundo para cualquier uso.
Para realizar el estudio, los investigadores se han basado en datos extraídos de las cuencas andaluzas de los ríos Guadalquivir, Guadalete y Barbate, donde se registra la mayor parte de la producción algodonera en España.
El trabajo, que publica el Journal of Cleaner Production, pretende alertar sobre la necesidad de un consumo razonable de un bien escaso como es el agua y cuya gestión es de vital importancia en zonas de escasa pluviometría.
Los datos indican que el algodón consume de media en España 778 litros por kilo de fibra producida, de los cuales el 90% corresponde a agua de riego. Sin embargo, un modelo de producción más intensivo y con mejores rendimientos como el predominante en 2005 lo reducía a una media de 675 litros por kilo de fibra. En 2009, con una producción con muchos menores insumos y riegos, y consecuentemente menores rendimientos, la media de consumo aumentó a 1.171 litros.
Los autores de la investigación son Daniel Chico, Maite M. Aldaya y Alberto Garrido, catedrático de la E.T.S. de Ingenieros Agrónomos, director del Centro de Estudios e Investigación para la Gestión de Riesgos Agrarios y Medioambientales (CEIGRAM-UPM) y subdirector del Observatorio del Agua.
Garrido afirma que el impacto de la moda vaquera sobre la producción de las fibras textiles ha supuesto un considerable aumento de las áreas de cultivo dedicadas al algodón, que se ha convertido en el más extendido. Anualmente se cultivan en el mundo unas 34.000.000 hectáreas de algodón.
“El que una producción comprometa o no los recursos hídricos vendrá dado por la gestión que se haga de los mismos y por las prioridades y riesgos que la sociedad esté dispuesta a asumir. No se puede atribuir a un solo sector la causa de la evolución positiva o negativa de un río o ecosistema”, afirma Garrido.
“Además –añade–, en el caso del sector textil, el uso de tintes y otros químicos (colas, oxidantes, estabilizantes, etcétera) lleva a que los efluentes de estas plantas tengan altas cargas contaminantes. Sin embargo, estos efluentes son tratados antes de ser vertidos. En los datos manejados en nuestro trabajo, los vertidos fueron siempre por debajo del límite que establece la administración municipal”.
Controles medioambientales
Los investigadores también recuerdan que no hay certificaciones específicas ni normativas respecto del uso del agua en la producción textil más allá de lo que tiene que ver con el cumplimiento de las autorizaciones de vertido. Esta ausencia contrasta con los estándares y certificaciones voluntarias que existen en relación al uso de productos químicos, como es el caso de Ökotex o Made in Green, que promueven textiles con menor impacto para la salud y el medioambiente.
No obstante, grandes marcas, tanto fabricantes como distribuidores, desarrollan y forman parte de plataformas que fomentan buenas prácticas entre los agricultores, especialmente pequeños productores de países en desarrollo. Un ejemplo es la plataforma Better Cotton Initiative. Otras, como Global Organic Textile Standard (GOTS ) o Naturland, lo que certifican es el uso de algodón orgánico.
Artículo publicado en Servicio de Información y Noticias Científicas (SINC).
miércoles, 15 de enero de 2014
martes, 14 de enero de 2014
lunes, 13 de enero de 2014
domingo, 12 de enero de 2014
sábado, 11 de enero de 2014
jueves, 9 de enero de 2014
Nailia Schwarz
Fotografías de Nailia Schwarz, nacida en San Petersburgo, Rusia, en 1976. En Rusia estudió y se graduó en Historia del Arte en la Universidad de St. Petersbug, para trasladarese a Alemania posteriormente, donde inició su carrera como fotógrafa.
martes, 7 de enero de 2014
Hallados en la Antártida negativos fotográficos de la expedición de Shackleton tras 100 años bajo el hielo

Los
negativos pertenecen a la fallida expedición de 1912 liderada por el
explorador británico Robert Falcon Scott, que pretendía convertirse en
el primer hombre en conquistar el Polo Sur. Sin embargo, Scott llegó al
punto de destino deseado 33 días más tarde que su rival, el explorador
noruego Roald Amundsen.
Los negativos de nitrato de celulosa, los
únicos testigos existentes de los hechos, fueron guardados en una caja
en el cuarto del fotógrafo de la expedición de Scott, Herbert Ponting.
Antartic Heritage Trust llevó el hallazgo a Nueva Zelanda, donde fueron
reconstruidas 22 fotografías en blanco y negro.
Los expertos de
la fundación han logrado reconocer puntos de referencia del estrecho de
McMurdo y lo consideran "un hallazgo emocionante".
“Se buscan hombres para viaje peligroso. Sueldo escaso. Frío extremo. Largos meses de completa oscuridad. Peligro constante. No se asegura el regreso. Honor y reconocimiento en caso de éxito”
A raiz de este anuncio se presentaron más de 5.000 aspirantes, de los que cuidadosamente selecciona a 27, que el 8 de agosto de 1914 parten de Londres rumbo al Polo Sur, a bordo del “Endurance”.
lunes, 6 de enero de 2014
domingo, 5 de enero de 2014
sábado, 4 de enero de 2014
viernes, 3 de enero de 2014
jueves, 2 de enero de 2014
"La vuelta al mundo para abrazarte por la espalda" J. Porcupine.

habríamos aplicado la quiromancia a los corazones,
y habríamos volado sin necesidad de aviones...
Pero nos peleamos,
y las miradas ahora son disparos,
y los saludos con la mano ya no son saludos...
Nos queríamos bastante,
nos amábamos bastante...
Queríamos que fuese para siempre, queríamos eternidad.
Y nunca también es una eternidad.
Tal vez hablé demasiado y sonreí muy poco.
Tal vez, tu también.
Amor, es lo que quiero ver.
Pero ya no podemos,
Seguimos creyendo en el amor,
pero no en el nuestro.
Si nos hubiésemos amado más...
seríamos felices.
Si nos hubiésemos amado más...
no estaríamos llorando a escondidas.
miércoles, 1 de enero de 2014
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