sábado, 26 de junio de 2010

Tu rostro mañana

Fragmento de Tu rostro mañana. Veneno y sombra y adiós.
Javier Marías


"Si no era quien yo creía, habrá de ser otro. Y dónde está entonces, he de dar con él, tengo que verlo." Esto es lo más que puedo decirte. No está necesitada de halagos, ni por supuesto de conquistas efímeras para reafirmarse. Cada vez que salga con alguien, si lo hace, será mirándolo como al definitivo, como a un futuro marido, y pondrá todo su empeño en que no se tuerza, lo tratará con infinitas buena voluntad y paciencia, queriendo quererlo, deseándolo a ultranza. Mal asunto para ella. Yo diría que eso espanta a los hombres, o sólo atrae a los pusilánimes. ....Ella es inteligente y cuando tenga que decepcionarse lo hará, aunque sea de mal grado y se resista y le cuesta. Quizá con alguien mediano o que la satisfaga parcialmente tan sólo, o incluso que tenga algún elemento que le desagrade, eso puede. Lo que sí me parece es que a ese posible marido, sea como sea, a ese proyecto, a aquel en quien fije la vista, le dará incontables oportunidades, pondrá mucho de su parte, intentará ser comprensiva al máximo, como sin duda lo intentó contigo hasta que superaste el límite, supongo. A ese hombre no le entregará cheques en blanco, pero antes de despedirlo gastará casi entero el talonario, poco a poco.
Que yo sepa, sin embargo, todavía no existe esa persona "

No hay comentarios: